Como jiujitseros hemos aprendido a vivir y entrenar con dolor, muchas veces cuando vamos con algún medico por un dolor nos dicen «descansa unas 3 semanas». En lo personal a veces me provoca mas «dolor» regresar de nuevo a entrenar sin condición física, cuando ya tenia algo avanzado.
El Doctor Miguel Anguel Mamoran quien también es un jiujitsero, nos comenta un punto interesante. A veces dejar de movernos nos empeora en vez de ayudarnos a mejorar. ( Claro hay de casos a casos y de gravedad a gravedad )
Nos comenta el Dr. Miguel:
Dos de los motivos más frecuentes de consulta son el dolor lumbar y el dolor en las rodillas.
Usualmente son causados por una alteración en la biomecánica, que es secundaria al sobrepeso, y que conlleva a desacondicionamiento. Esto termina siendo un circulo vicioso; por tener dolor dejamos de realizar actividad física/ejercicio, eso genera más desacondicionamiento, y eso genera más dolor.
Es importante que entendamos que la solución, así duela, ¡es hacer ejercicio! ¿Por qué?
Resulta que la explicación neurocientifica del dolor involucra desde los nociceptores (mal llamados «receptores de dolor») hasta complejos procesos cognitivos, incluyendo zonas como la amígdala cerebral, que está relacionada con el miedo.
Al tener dolor en una zona y sentirlo aún más tras realizar una actividad determinada nuestro sistema genera memoria a largo plazo involucrando la amígdala (estructura relacionada con respuestas primitivas), como si fuera una respuesta al miedo.
¡Este es un proceso maladaptativo que conlleva a ver el movimiento como un riesgo! ¡Una percepción errónea! De hecho, algunos estudios han demostrado que con tan solo pensar en hacer el movimiento pero sin ejecutarlo se produce dolor y elevación de marcadores de la inflamación, por estar la memoria involucrada. .
Entonces, realizar el ejercicio en un entorno controlado hace que cambiemos ese estímulo que se ve como «riesgo» a una «necesidad», lo que cambia el procesamiento neuronal, la amígdala se ve menos involucrada, lo que hace que exista menos dolor a futuro y menos inflamación. .
Por otra parte, hay un mecanismo llamado «hipoalgesia inducida por ejercicio», en el cual, tras el ejercicio doloroso se activan sistemas de opioides endógenos (analgésicos de nuestro cuerpo) y hay liberación de B-endorfinas (relacionadas con bienestar). Haciéndonos sentir bien y disminuir el dolor.
Finalmente, al hacer ejercicio se fortalecen las estructuras y se genera re-acondicionamiento, lo que terminará por corregir la causa del problema, quitándonos ese molesto dolor crónico.